Las pasiones se duermen ¿podrán despertarse? en letargo, vemos en lo que leemos aquello que llama a encender aquella flama que enciende la sangre, aprieta los músculos, bombea fuerte el corazón, se agita la respiración.
Esa entrega, esa desmesura irracional que transforma en bestias a quienes no saben dirigir su energía y potencialidad.
Recorriendo juntos los calendarios por más de un decenio, hemos cambiado y apagado ese instinto, quizá sea mi culpa, estoy exhausta. He sido diezmada por mis propias ambiciones, y cada vez que pienso que puedo más, el mundo se enlentece y me da a saborear el amargor de mi soberbia, devolviéndome a la soledad de encontrar las líneas en mi mente.
Quizá me estoy volviendo loca, mi estabilidad emocional se reduce con cada hora de estudio, con cada segundo de vida perdido entre libros de civil y procesal. Ya no sé cuántas horas, cuantos días, meses... pero si han sido 6 años eternos... y aún falta... falta tanto.
Quiero irme, ver mi cielo, escuchar el viento y mi lluvia.
¿Hasta cuando sigo posponiendo mi vida? Dios escúchame, dame fuerza... la necesito, por favor, que estos demonios adictos al sufrimiento y necesidad del cuerpo se alejen de mí. Protégeme con tu sabiduría, compárteme tu templanza, dame la mano, no me dejes caer en el abismo del auto flagelo que mi sombra empuja por sacar al consciente.
Ayúdame Dios, a encontrar la paz en este camino, a no perder esa chispa de pasión, el amor por crear, por pintar, por hacer música, por escribir... no me abandones en esta soledad tan profunda.
Mi madre siempre me dijo: "DONDE MIS OJOS TE VEAN, DONDE MIS MANOS TE ALCANCEN Y DONDE MI VIDA TE PROTEJA"...
En el mundo de hoy el tiempo crea una brecha enorme entre aquello que más amas, porque mis ojos tienen que estar frente a una pantalla, mis manos lejos de ti y mi vida a kilómetros de distancia sin poder protegerte.
"La vida no es más que un sueño, flotando en un camino, un camino, conscientemente parece que todo lo que queda es un cerebro de ego hecho por la vergüenza del hombre, vergüenza, amor después de la lluvia"
Cantas veces escuché esta canción en mi walkman, un CD hecho con un quemador de casa... escuché tantas veces esto en los andenes del metro, esperándolo, para llevarme al liceo y luego la universidad, recuerdo tantas veces ese recorrido, las luces pasando rápidamente en el túnel, el sordo ruido que mis audífonos no podían cubrir... el miedo constante a que las Duracell se agotaran... ¿cuántas veces fueron? ni idea, pero estoy aquí hasta el aparato reproductor masculino escuchando y recordando estos parajes de mi vida, cuando era más simple y no tenía que memorizar tanto, no tenia que entender tantas cosas... tenía tanta energía, increíble pensar que pese a todo no estaba así de cansada... estoy realmente muriendo de la risa al verme en esos tiempos, las dificultades de ese entonces parecen hoy ¡TAN NIMIAS! Dios, gracias, gracias, gracias, lo hicimos bien y ahora estamos aquí, ante otro sufrimiento... Constanza del futuro, no olvides esto que estás pasando... es horrible ajajajajaja
"Soy solo un hombre, peleando contra otro hombre por tierra... por tierra, mientras me transformo en arena, a pesar del dolor... ves mi pena es real, observa mi mundo disolverse, y pretender que ninguno de nosotros lo ve caer, mientras me convierto en arena, me tomas de la mano y declaras que el amor prevalece ante todo."
Es tremendo esto, es como responsabilidad extracontractual por hecho de terceros... es como si un incapaz viera como el peso de la ley cae sobre los hombros de sus progenitores mientras él los ve sufrir y pagar el precio de su ignorancia, de su incapacidad, de su falta de cuidado y diligencia... ajajajajaja esto se está saliendo de las manos... maldito grado.
Estoy en este instante reescribiendo un recuerdo, el metro por el Código Civil, las luces por responsabilidad extracontractual de terceros, las pilas que se acaban por la comparación con la responsabilidad contractual, precontractual, postcontractual, y legal. Pobre vístima de los daños causados por terceros, si no fuera por la responsabilidad objetiva estaría pedido... ¿y tanta gente no cacha esta wea? ajajajajaja como duele el desasne, es tanto sacrificio estudiar esto, pero puta que sirve... si, el Gincito ya entró en provecho... ojalá mañana me acuerde de todo esto...
hearing this song in my head
breathing for something hide
a thorn echoing in my mind
as if i had forgotten something
very very important
i did all my stuff
i made our bed
fed our dog
cherished our cat
and yet, there's something missing
We came to work together
i drove our car
you gifted me with a nice starbuck's coffee
you kissed me and said "goodbye, have a nice day"
but there's something lacking
i sat at my office
looked through the window
the sunrise comming near
is it always this early?
why am i here?
even in this 50th floor
i miss the ground
this body, this body holding me
embrace this moment, remember
we are eternal, all this pain is an illusion
all the stress from that damn test
is going to be over soon
and i'm going to be successful
Our dream's land
that feeds our spirits
holding our bodies
reminds us that we are not alone
all this pain is an illusion
We will barely remeber what came before this precious moment
choosing to be here right now
hold on, stay inside
So familiar and overwhelmingly warm
This one, this form I hold now
Embracing you, this reality here
This one, this form I hold now, so
Wide eyed and hopefulWide eyed and hopefully wildWe barely remember what came before this precious moment
Choosing to be here right now
Hold on, stay inside
This body, holding me
Reminding me that I am not alone in
This body, makes me feel eternal
All this pain is an illusion
PARABOLA
We barely remember
Who or what came before this precious moment
We are choosing to be here, right now
Hold on, stay inside
This holy reality
This holy experience
Choosing to be here inThis body, this body holding me
Be my reminder here that I am not alone in
This body, this body holding me
Feeling eternal, all this pain is an illusion
Alive
In this holy reality
In this holy experience
Choosing to be here in
This body, this body holding me
Be my reminder here that I am not alone in
This body, this body holding me
Feeling eternal, all this pain is an illusion
Twirling 'round with this familiar parable
Spinning, weaving 'round each new experience
Recognize this as a holy gift andCelebrate this chance to be alive and breathing
A chance to be alive and breathingThis body holding me reminds me of my own mortalityEmbrace this moment, remember
We are eternal, all this pain is an illusion
En esta vorágine de vida, ultimamente me siento estancada... más que estancada, estoy retrocediendo. Todo avance vertiginoso, todo buen resultado parece esfumarse ante la debilidad del espíritu y la fuerte exposición a situaciones más que peligrosas. El tiempo, al igual que el dinero, se escurre entre reels y gastos innecesarios...
Tengo que estudiar 5 años de carrera como si fuera de "0" y me pregunto ¿por qué no lo hice antes? ¿por qué nadie me dijo? ¿por qué no lo leí? ¿qué hago si no logro pasar el examen de grado? ¿qué pasa con nuestros sueños? ¿qué pasará conmigo? Mella el orgullo verse en situaciones de fracaso, pero siempre hay que pensar en alternativas... y sigo esperando el día del juicio final, que lo aplazan y aplazan sin convertirse en en ese escape maravilloso que necesito.
Y es en estos días que todos los influjos y reflujos de la mente se vuelven en mi contra: mi incapacidad para concentrarme, para entender lo que hay que hacer, mis sueños y diseños atiborrados de ansiedad por terminar la gran obra, el estudio que me demuestra que las herramientas que tuve durante estos 5 años fueron bastante débiles en algunos aspectos, el miedo que hace retorcer las entrañas por saber que de ésto depende tanto... TANTO... Dios, que horrible angustia, mis arcontes se regocijan en mi mierda emocional, están gorditos los hijos de la meretriz... detesto vibrar tan bajo, pero tampoco tengo la energía para cambiar mis emociones ni elegir buenos pensamientos. La resiliencia no siempre requiere la aparición de pensamientos positivos, a veces se necesita de voluntad para crearlos, deseos hechos acción... acción de pensar... algo de lo que no tengo ganas.
Ultimamente, requiere un gran esfuerzo ver en mi mente las imágenes que usualmente me impulsaban a seguir adelante. Quizá sea el mundanal ruido, la creciente buya, el incesante sonido mecánico que abunda en todos lados, la premura del pasar de los segundos, los minutos incinerados en la procrastinación... quizá sea mi debilidad la que debilita mi disciplina y la necesidad de aire limpio (realmente limpio) lo que no me deja despejar toda esta basura interna.
El cielo realmente azul, las nubes danzantes, los árboles creando vapores, el viento incesante, el sol en la ventana, el sonido de la estufa a pellet, el olor a pan tostado en tostador puesto sobre cocina a gas, el café de la mañana, el olor a tierra mojada, el sonido de la lluvia azotando mi ventana... qué dolor de cabeza estar aquí escuchando los motores de los aires acondicionados, los reverberantes retumbos de vehículos sin "tubos de escape" que resuenan hasta este piso 50... los murmullos de los colegas, los tacos resonando en el piso de granito, el sonido de éstas teclas donde escribo.
Silencio... música del cosmos... necesito encontrarte.
Luz necesito que quites el frío de mis extremidades y de mi mente.
Dios te necesito a mi lado en esta incertidumbre.
Constanza se lo que tengas que hacer para llegar donde quieres estar.
Escuchando un recuerdo viene la tristeza y me hace repetir "qué pena" tres veces... es tan absoluta y devastadora, es ver con tus propios latidos del corazón que se pierden los suspiros, que ha fenecido una emoción, que un sentimiento a aceptado su muerte y desciende en soledad al inframundo para un descanso eterno. ¿de qué me sirve tener esperanza? sólo prolongaré mi tormento.
Es mi inefable culpa, mi culpa no saber estimular adecuadamente tus instintos. Es mi responsabilidad no quemarte con mis pasiones, ni abrumarte con esta necesidad horrible que tengo de extrañarte por la lejanía. Sin embargo adoro este tiempo de soledad donde puedo aplacar por mí misma toda esa exasperación ardiente, que ya no adolece de remordimiento, si no que asoma como escape a las necesidades de la carne, sin faltar a la verdad, sin romper promesas... siendo fiel a la fidelidad.
Es esta silla coja la que empieza a trastabillar en las corrientes de las inseguridades, pues los demonios intentan hundirla... pero ¿Cuánto más durará el honor de un amor resignado? ¿lo piensas? ¿te importa? sé que cuento con tu voluntad, pero no con tu deseo. Qué pena... de nuevo esa frase que reticente me obliga a asumir que el resto de mi existencia será así, incompleta, pues mi mundo interior es demasiado basto para ser recorrido por tus manos ciegas.
Qué pena... esta añoranza que se resiste a morir en mi pecho... ese deseo de noches extáticas en medio de la tormenta, perdidos en el vaivén del viento y de la lluvia. ¿Es todo demasiado cansino? ¿es el aburrimiento y la monotonía lo que anula ese deseo de prender las llamas? Nunca he podido compartir esta hoguera. Quizá soy muy egoísta y lo quiero todo para mi, pero es que siempre resulta demasiado fútil la brisa para esta tormenta que busca refugio en un lugar inocuo para sembrar su semilla.
Así mueren trozos de espíritu, el cable que conecta el alma con la mente se daña y ya no puede ser reparado ni por la voluntad ni por el deseo, porque la carne material sigue empujando su naturaleza reproductiva y su añoranza de locura. Qué pena.
Es tan linda esta canción... cada vez que estamos lejos la pienso, la escucho y recuerdo el antes... el tiempo, las memorias... y no te miento, hoy las evoco con nostalgia, como si en medio de nuestras ambiciones hubiéramos perdido algo tan importante... hemos construido nuestras jaulas, pero "la jaula no me abriga del frío, sólo la cálida prisión de tus manos entre las mía', como el suave retorno cuando amanece el día"... el amanecer lejos, a 1234 km, en nuestra casa, con la estufita prendida, acostaditos con Sansa acurrucada entre nosotros.
Pero ¿qué ha pasado con nosotros? somos perri/gatipadres, estamos a full en nuestros deberes y quehaceres... edificando, avanzando, soñando y vuelta a trabajar, pero... qué ha pasado con "Hasta que en medio de los dos las brasas no se hagan ceniza, y pueda ver brillar el fuego. Quédate conmigo a la deriva, en cualquier lugar..."
"Y estar contigo en lágrima y suspiros, rompiendo el aire en carcajadas... no quiero ser un rayo perdido en la noche, vagaré descubriendo para abrir senderos. Prefiero ser aceite separado del agua y no un cobarde corazón que espera ser sincero pa' sentir de nuevo"...
Mi hogar, ese lugar en tu pecho, donde late fuerte tu corazón... a ratos ya no me resulta tan acogedor como antes, ¿seré yo? he cambiado... ahora el eco de las semillas de la discordia comienzan a echar raíces, pues se alimentan de esa pregunta que subyace en silencio en un rinconcito de mi mente ¿le habré puesto mucha leña al fuego, tanto que se arrebató y terminó por consumir todo el oxígeno... e incluso las brazas... donde sólo queda reciclar las cenizas hasta que la muerte nos separe? Será el avance del tiempo que ahoga las chispas de la pasión y la juventud... o tal vez el ímpetu de encontrarnos en ciernes del siguiente gran paso que llevamos tantos años trabajando... ahhhhh siempre tantas preguntas... mis culpas rebuc sic stantivus etaliquid novo non emergentibus... algo nuevo... realmente le temo a esa posibilidad, tanto para ti como para mi... pero pacta sunt servanda... nuestras promesas valen y nunca hemos pensado en condonar el dolo futuro (eso está prohibido por nuestro Código Civil y adolece de nulidad absoluta, incluso se asimila a dolo agravando la responsabilidad contractual de ese contrato celebrado en virtud del art. 102 del CC)...
Sé que es mi responsabilidad controlar esta añoranza de la energía jovial que nunca utilicé en su debido momento... a veces me genera arrepentimiento haber sido siempre tan seria, haber intentado siempre ser lo que se esperaba de mí, mientras me veían la cara y me advertían que "carpe diem" es más que una simple frase... y yo, aquí, sentada estudiando, mientras estas ideas me distraen horriblemente, y me hacen añorar nuestros primeros pasos... extrañando las aventuras, deseando experiencias nuevas.
"Y estar contigo en lágrima y suspiros, rompiendo el aire en carcajadas... no quiero ser un rayo perdido en la noche, vagaré descubriendo para abrir senderos. Prefiero ser aceite separado del agua y no un cobarde corazón que espera ser sincero pa' sentir de nuevo"... bis... bis... bis...
La gran prostituta que habla la biblia… la iglesia católica y sus silencios respecto de tantos pecados de sus líderes, permite que se profanen sus símbolos, permite que los Jesuitas ostenten el poder… a sabiendas de los oscuros orígenes y perversiones de sus “principios inspiradores” y de sus misterios tan admirados por la masonería. El silencio, la inoperancia ha permitido que se dilapiden los valores morales. No ha sido gratuito, han pervertido el mensaje de Cristo, han transformado la senda del Dios interior (temet nosce) en un camino de pago vencido por cada pecado cometido.
Así occidente se ha pervertido, perdido la razón y sus valores morales, se ha deconstruido aquello que cohesiona la sociedad y la transforma en una masa acéfala y amorfa que se mueve cual péndulo en las vertientes ideológicas que la economía y el poder político promueven y manipula, para que la riqueza se siga concentrando en unos pocos, a costa de todo el mundo.
Las guerras, la sangre inocente, el humo, el miedo, la locura… se concentran y exaltan en nuestros corazones mirando embelesados las pantallas que muestran con morbo y en vivo la violencia. ¡Cuánta energía emocional puesta a disposición de los arcontes! Somos su ganado, se alimentan de nuestras exaltaciones... a mí me avergüenza verlas y sentirlas… ser consciente de ellas y lo repulsivas que me resultan.
Este fin de semana fui a pasear al Persa Bío Bío y más encima fui con mi marido en metro… metro, hace años que no uso el transporte público (gracias a Dios). Para mi desgracia, ese día había un partido en el Estadio Nacional… miles de hinchas atiborrados en estación Irarrázaval… cientos de estúpidos embelesados cantando himnos que denotan su carencia neuronal, su dependencia al alcohol y las drogas (todas cosas que concurren en mayor detrimento de la escasa capacidad intelectual de estos seres de “paz y de luz” azul), todos unidos en esa “masa acéfala y amorfa” exaltada por un equipo de futbol… calentando la energía, previo al encuentro que, a pesar de los resultados, sigue generando una fe ciega sin entendimiento, fe de la que se alimentan esos seres, energía impura del lívido colectivo que se forma en las arenas de conflicto competitivo donde dos equipos, conformados por 11 individuos por cada lado y 5 árbitros, corren detrás de una pelota, como si la vida pendiera de que ella llegue de un extremo a otro. ¡Qué estupidez! Deporte le llaman… si supieran que el trasfondo es mover poder político, blanquear dineros y concentrar el poder de “la barra brava” para seguir subsumiéndonos en la decadencia moral y espiritual, para alienarnos de nuestras vidas y escondernos en esa masa, perdiendo el pensamiento, obviando la lógica, desintegrando el ser… regalando energía, muy apasionada, a estas entidades que por ignorancia no conocen y, en su bendita ignorancia, siguen ofreciendo gratuitamente… el rebaño perfecto, la oveja (el goym) de sacrificio… oh que razón tenía el Talmud…quizá, los gentiles nos merecemos este destino.
… y así todos vemos que las profecías se cumplen, que nos acercamos al “fin de los tiempos”, la oscuridad en las almas de los hombres es tan profunda: el miedo, la envidia, los celos, la gula, la mentira, la ira… consumen nuestras almas y la exprimen con esperanzas externas, que nada se acercan a la luz divina que “el Dios verdadero” nos otorgó en la creación… luz de la cual se alimentan (coincidentemente) estas entidades que, por alguna razón, nuestros sentidos (pero sí nuestros instintos) perciben.
El camino del estoico, el camino de Zaratustra, el camino de Horus, Hermes Trismegisto, Buda, Krishna, Ahura Mazda, Mahoma, Jesús… y tantos otros maestros “profetas”, silenciados en etiquetas burdas o religiosas (re-ligare, re unir… que hoy es un completo oxímoron), porque “los que saben” conocen las armas de la denostación y el marketing que lava cerebros, para ponerle esa detestable etiqueta de “esotérico” o “conspiranoico”, “no científico”… mientras ellos, en su alquimia, nos revuelcan en la nigredo en que nos tienen sumergidos (curiosamente regida por el planeta Saturno)… mientras ellos ascienden en el camino a la iluminación, porque dicha senda es sólo para unos pocos.
Tanta coincidencia hace presumir que todo es resultado de un plan… un plan tan bien hecho, perfectamente hecho para encerrar nuestras mentes, alimentarse de nuestras emociones, y vibraciones físicas… esclavizándonos por toda la eternidad, sirviendo a la gran prostituta, sirviendo al “contrario” … viviendo la mentira de la existencia, perdiéndonos a nosotros mismos, negando el alma, el espíritu… a Dios dentro del templo, el templo de cada individuo.
Y entonces… ¿cuál es el plan? ¿sálvese quien pueda? ¿cómo salvas a alguien que no busca en sí mismo su propia salvación? No puedes obligar a alguien a ir en la búsqueda de su alma ni de su espíritu, ni de la sabiduría que en su luz puedes encontrar… ¿estamos condenados? Quizá… vamos de camino al desfiladero… ¿es posible de detener, evitar o eludir?
Hace años que veo a la humanidad camino al colapso, mis esperanzas de una vida plena, tranquila, menos superficial y más conectada con la tierra se sienten tan etéreas... Aunque estemos condenados, espero poder ver a Dios en cada segundo de su creación y de las mías… volver a la raíz de la creatividad, encontrar belleza y disfrutar de cada suspiro. Mirar sin miedo la oscuridad en la noche, saber que las estrellas observan a lo lejos la parsimonia del tiempo infinito desvanecerse en cada gota de sangre que se vierte en la tierra. Ver la muerte y dejarla ir en el susurro del viento, mientras la vida, con el ímpetu del mar, vuelve a llenar de colores el presente.
La vida ha sido buena... lo que nos rodea es lo penca.
Así comienza esta reflexión sobre la fortuna de ser yo, de vivir mi vida y agradecerle al creador por todas las maravillosas cosas de las que gozo.
Gozo del amor de mi marido
Gozo del amor de mis padres
Gozo del amor de mi Sansa y de mi Martina
Gozo del cariño y compañerismo de mis amigas
Gozo de mi vida laboral
Gozo de nuestras metas conseguidas y de las nuevas metas que vienen...
Todas estas cosas son cosas externas que enriquecen profundamente mi vida, sin embargo, al leer este blog, puedo verificar mis avances y retrocesos humanos.
Sigo disfrutando de la soledad, de la música, ahora más que nunca de la lectura (¡me perdía un mundo de maravillas!), de mis pensamientos, de la búsqueda incesante de la armonía entre el saber y el sentir, del encontrar y descubrir, de orgullo y prejuicio, sensatez y sentimientos... aajajaja yaya Jane Austen...
"Mientras vivimos de acuerdo a la raza, color o credo, nuestras vidas dictaminadas por tradiciones, supersticiones y falsas religiones... a través de eones... si, seguiremos intentando" intentado ¿qué? ni idea, pero seguimos adelante, aunque no den ganas de estudiar pa'l grado, y entrenar el body de siempre paja... seguiremos intentando... aunque la semilla deconstruida intente destruir de raíz la cordura y la lógica. Seguiremos "hasta el fin de los tiempos"
Como es ¿tradición? vengo en señalar mis agradecimientos del año 2023.
Doy gracias a todo lo que la vida me ha dado, esta experiencia de vida ha sido bastante grata. Cambiar la forma en que uno observa las cosas, el animus y el entendimiento terminan por modificar en gran parte la realidad, te ayudan a encontrar a Zaratustra en tu interior y a ver con los ojos del súperhombre lo que nos rodea.
Doy gracias por mi Marido, sí con M mayúscula, porque es el mejor compañero de aventuras, proyectos, el pilar de apoyo de esta Bruja... perdón, brújula que busca su norte (sur en este caso) sin descanso.
Doy gracias a mi cuerpo, que me contiene, que me mueve, que me cansa, que duele después del ejercicio, que a veces me agobia pero vamos juntas a por esta vida intentando llevarnos bien y sin pecar en exceso.
Doy gracias por mis niñas, Martina y Sansa, que me obligan siempre a usar mi estanque de paciencia y energía al límite.
Doy gracias por mis amigas, que juntas hemos recorrido estos 5 años de estudio, compañerismo y amistad. Gracias a Dios por ponerlas en mi camino en el momento que más necesitaba aprender de la amistad.
Doy gracias por mi trabajo que me ha permitido crecer profesionalmente, me ha permitido estar ad portas de mi egreso como Licenciada en Ciencias Jurídicas y Sociales y siempre aprender cosas nuevas y, ya después de casi 11 años, hacer la pega en tiempo record.
Doy gracias por la ecuanimidad de mi padre, y la rabia de mi madre. Ambas caras de la moneda me han guiado a contrario sensu en el sendero del matrimonio.
Doy gracias y me rindo... me rindo a la gravedad y a lo desconocido que está por llegar, elijo vivir esta vida a pesar de lo difícil que a veces todo nos parece, aunque mis ambiciones sean grandes (a veces demasiado), sé desde el fondo de mi corazón y mi alma que la luz del sol ilumina mi camino, y que incluso en la oscuridad de mi propia ignorancia encontraré la sabiduría para liberarme de las ataduras de la mente y llegar allí donde mi espíritu pertenece.
mi mente se teletransporta a 1.216 km desde el living de mi departamento,
y aunque allí es también de noche,
ante mí aparecen las imágenes del lugar donde pertenece mi alma.
Allí soy la lechuza que vuela sobre mis tierras
y el viento que surca por las tardes y que azota en las noches de tormenta contra mi casa.
Soy el pasto indómito del que hago mulch para mis árboles,
incluso ese espinillo rebelde que crece aunque lo cortes mil veces,
soy sus flores amarillas que cubren todas sus espinas,
soy el pudú que sale de la quebrada a saludarme.
Soy las murras que duermen en invierno esperando el sol del verano para hacer que crescan mis frutos y hacerlos mermelada,
soy las semillas de las moras que nadie comió y que alimentaron la tierra donde se apoyan todos los cercos que separan los sueños de unos de los de otros.
Soy las piedras que decoran con sus colores el suelo areno y las que soportan
el cemento sobre el que se apoya y erige mi casa,
soy el suelo que piso y sobre el que se apoya todo lo que hemos soñado.
Soy esos muebles de cocina que te quedaron maravillosos,
soy la vista de la ventana de la cocina donde se presenta el cielo y sus amaneceres, soy la mesa y los taburetes sobre los que tomamos cafecito y comemos pan tostado con huevos de campo revueltos.
Soy las ventanas transparentes que, hoy cubiertas de cortinas, permiten que la luz entre al hogar y me maravillan con paisaje y de los colores que se puede ver a través de ellas,
soy esas ventanas, hoy limpias y transparentes, que permiten a los ojos llenarse de imágenes que nutren el alma.
Soy la estufa y sus pellets que mantienen mi casa calentita en el invierno y durante el temporal,
Soy las latas que protejen mi casa de la lluvia,
y también la música que se produce cuando baila cada gota sobre su superficie, maravillando al que se guarece bajo mi alerón.
Soy también el camino de ripio y de asfalto que me dirige siempre a casa.
Soy todos los árboles de mi quebrada, el blanco de las flores de quillay,
la madera roja de los arrayanes, el perfume del peumo, la voraz quila, los robustos y añosos robles cuyas hojas susurran al viento melodías de paz.
Soy el agua que corre en mi estero y que alimenta mi casa y mi cuerpo,
soy la lluvia que arrecia en las noches acunando nuestros sueños.
Soy el camino a la playa y al fiordo tranquilo que lo baña,
y la desembocadura de mi río que, constante, viaja desde alguna de las tantas vertientes que riegan esta mágica isla.
Soy las nubes que nacen evaporadas de nuestro bosque,
donde la tierra hace el amor con el cielo.
Soy todas esas hermosas estrellas que puedes observar en las noches de luna llena y que a veces se esconde detrás de las inmensas y tormentosas nubes con sus innumerables tonalidades grises y negras.
Soy los canes de mi vecino, que me ladran cada vez que me acerco a los límites de mi campo con su territorio,
soy quien recibe sus lametazos de saludo y quien les agradece por reconocerme pese al transcurso del tiempo.
Soy el camino serpenteante a Huillinco, ese lago hermoso, quieto y frío, que durante las mareas altas se roba las costas.
Soy las dunas del camino a Cucao,
soy su playa de arenas negras donde las olas golpean con furia su costa en el vendaval.
Soy esa entrada de mar que corta el camino al Muelle de las Almas.
Soy ese vehículo que cargo a tope en cada viaje para retornar mi cuerpo material a aquel lugar donde dejo mi espíritu cada vez que lo visito.
Soy el aguilucho que caza en las tardes,
soy las ovejas del vecino que pastan tranquilas,
soy los loros que vuelan en su bandada y que se posan sobre las copas de los árboles que rodean mi hogar.
Soy el silencio de mi casa vacía,
soy todo eso que dejo allá,
soy la salida Quinched, el camino Huitauque, el portón que me deja acceder a mis sueños hechos realidad,
Soy la cúpula celeste que se cierne sobre nuestras cabezas,
Siempre que nos juntamos con mi familia, se produce una cosa maravillosa. Nos invade la nostalgia y contamos nuestras anécdotas, preguntamos por nuestros parientes, pedimos noticias de los cercanos y conversamos sobre nosotros, sobre nuestros sueños y proyectos, sobre aquello que con tanto esfuerzo y sacrificio hemos logrado.
Estas instancias son sublimes, pues nos permiten ver por unos minutos, los fragmentos de las almas de quienes hemos compartido este camino llamado vida.
A veces quisiera que el tiempo o las energías nos permitieran compartir todos aquellos matices que nuestros ojos captan y que se graban en nuestra memoria; todas esas emociones que han calado hondo en nuestros corazones, y por supuesto, todas aquellas verdades que la vida les ha ido revelando en el transcurso de los años.
Me encanta escuchar las historias de nuestros predecesores y ancestros, como ellas forjaron la construcción de estos extraordinarios y resilientes individuos que conforman mi familia, y como aportar de alguna manera con mi propia sabiduría y experiencia vital, la que le podría servir a futuras generaciones para que, ojalá, tomen mejores decisiones al momento de enfrentar la vida y no cometan los mismos errores que uno por ignorancia y desconocimiento cometió; estas historias, toda esa información que uno les entrega tiene por objeto permitirle a otro ser ahorrarse unos momentos de incomodidad o de sufrimiento, o le facilitará ver la vida de otra forma, o incluso, ojalá, alcanzar sus metas, pues la experiencia forma parte del conocimiento que levanta el velo de la incertidumbre (cosas que cuando uno es joven no está verdaderamente interesado).
Hoy también descubro que me gusta escarbar en las personalidades de los jóvenes, sus experiencias novedosas rodeadas de cosas nuevas que, para uno en su adultez, son rara vez apreciables. A veces me alegra tener "algo" en común con ellos, conocer una aplicación o un juego del que podamos conversar y compartir. ¿Es esa energía juvenil la que tanto añoramos cuando llegamos a la senilidad?
No sé por qué antes evitaba tanto vivir esta experiencia, como si encerrarme en un capullo de silencio me protegiera de algo que estaba destinado a hacerme crecer como ser humano (no digo persona, porque no me gusta su significado); o el miedo al rechazo por la inexistencia de estas "super experiencias" que uno se suponía debía vivir y que yo, por mi naturaleza egoísta, nunca me atreví a vivir. En realidad, si sé por qué las evitaba tanto, sin embargo, me vi obligada a salir de esta burbuja y experimentar el mundo y sus enormes montañas rusas de emociones que, espero hoy, estar mejor preparada para enfrentar sus altos y bajos.
Hoy celebro estas experiencias, las disfruto un montón aunque a veces me sigan pareciendo un poco superficiales y agoten todo lo que resta de mi energía mental... conversar de la vida es como tener un telescopio (¿o microscopio?) a otras dimensiones, a los mundos ocultos en las mentes de otro ser humano.
A veces encuentras gente que tiene talento para contarte sus cosas, y pareciera que un libro ha sido abierto ante ti, lleno de ilustraciones de colores y onomatopeyas (a veces, eso sí, le ponen mucho color); otras, en cambio, tienes que usar todos tus sentidos para descifrar la verdad entre sus códigos, actitudes y gestos, ya que detrás de su superficie puedes encontrar esa parte transparente de su ser, su luz y oscuridad, esa parte de nosotros mismos nos negamos a compartir, un atisbo de "La Sombra" que C. Jung nos cuenta en su libro "Los arquetipos y lo inconsciente colectivo".
Creo que haber aprendido a observarme con honestidad fue la mejor herramienta que esta existencia me ha otorgado, a saber: a través de mi propia experiencia descubro la verdad, la comparto y comparo con la de otros, y así construyo este ser, en parte espíritu, en parte cuerpo, y con su alma en medio, luchando por encontrar la paz (que generalmente se encuentra en los brazos de mi compañero de ruta), buscando llegar a la línea infinita que se dibuja en el horizonte... pero no cualquier horizonte, no... sino aquel que llena mi éter, ese horizonte que tengo a 1.231 kilómetros de esta ciudad... donde mis lechuzas vuelan libres, los aguiluchos se pelean por la soberanía del cielo y el pudú se acerca a mi casa a comer el pasto salvaje que crece a su alrededor.