viernes, 29 de diciembre de 2023

218va Entrada, Adagio: Gravity, A Perfect Circle


 Como es ¿tradición? vengo en señalar mis agradecimientos del año 2023.

Doy gracias a todo lo que la vida me ha dado, esta experiencia de vida ha sido bastante grata. Cambiar la forma en que uno observa las cosas, el animus y el entendimiento terminan por modificar en gran parte la realidad, te ayudan a encontrar a Zaratustra en tu interior y a ver con los ojos del súperhombre lo que nos rodea.

Doy gracias por mi Marido, sí con M mayúscula, porque es el mejor compañero de aventuras, proyectos, el pilar de apoyo de esta Bruja... perdón, brújula que busca su norte (sur en este caso) sin descanso.

Doy gracias a mi cuerpo, que me contiene, que me mueve, que me cansa, que duele después del ejercicio, que a veces me agobia pero vamos juntas a por esta vida intentando llevarnos bien y sin pecar en exceso.

Doy gracias por mis niñas, Martina y Sansa, que me obligan siempre a usar mi estanque de paciencia y energía al límite.

Doy gracias por mis amigas, que juntas hemos recorrido estos 5 años de estudio, compañerismo y amistad. Gracias a Dios por ponerlas en mi camino en el momento que más necesitaba aprender de la amistad.

Doy gracias por mi trabajo que me ha permitido crecer profesionalmente, me ha permitido estar ad portas de mi egreso como Licenciada en Ciencias Jurídicas y Sociales y siempre aprender cosas nuevas y, ya después de casi 11 años, hacer la pega en tiempo record.

Doy gracias por la ecuanimidad de mi padre, y la rabia de mi madre. Ambas caras de la moneda me han guiado a contrario sensu en el sendero del matrimonio.

Doy gracias y me rindo... me rindo a la gravedad y a lo desconocido que está por llegar, elijo vivir esta vida a pesar de lo difícil que a veces todo nos parece, aunque mis ambiciones sean grandes (a veces demasiado), sé desde el fondo de mi corazón y mi alma que la luz del sol ilumina mi camino, y que incluso en la oscuridad de mi propia ignorancia encontraré la sabiduría para liberarme de las ataduras de la mente y llegar allí donde mi espíritu pertenece.

Elijo vivir.

jueves, 9 de noviembre de 2023

217ma entrada, Ideas: Cierto es que...

Voy a morir creyendo en lo que he elegido creer

Voy a morir sabiendo que nunca sabré la verdad

miércoles, 20 de septiembre de 2023

216ta. Entrada: Peaceful Mind Meditation, Malte Marten. "Meditación del soy"

 


Cierro los ojos,
escucho esta bella melodía y
mi mente se teletransporta a 1.216 km desde el living de mi departamento,
y aunque allí es también de noche,
ante mí aparecen las imágenes del lugar donde pertenece mi alma.
Allí soy la lechuza que vuela sobre mis tierras
y el viento que surca por las tardes y que azota en las noches de tormenta contra mi casa.
Soy el pasto indómito del que hago mulch para mis árboles, 
incluso ese espinillo rebelde que crece aunque lo cortes mil veces,
soy sus flores amarillas que cubren todas sus espinas,
soy el pudú que sale de la quebrada a saludarme.
Soy las murras que duermen en invierno esperando el sol del verano para hacer que crescan mis frutos y hacerlos mermelada,
soy las semillas de las moras que nadie comió y que alimentaron la tierra donde se apoyan todos los cercos que separan los sueños de unos de los de otros.
Soy las piedras que decoran con sus colores el suelo areno y las que soportan
el cemento sobre el que se apoya y erige mi casa, 
soy el suelo que piso y sobre el que se apoya todo lo que hemos soñado.
Soy esos muebles de cocina que te quedaron maravillosos,
soy la vista de la ventana de la cocina donde se presenta el cielo y sus amaneceres, soy la mesa y los taburetes sobre los que tomamos cafecito y comemos pan tostado con huevos de campo revueltos.
Soy las ventanas transparentes que, hoy cubiertas de cortinas, permiten que la luz entre al hogar y me maravillan con paisaje y de los colores que se puede ver a través de ellas,
soy esas ventanas, hoy limpias y transparentes, que permiten a los ojos llenarse de imágenes que nutren el alma.
Soy la estufa y sus pellets que mantienen mi casa calentita en el invierno y durante el temporal,
Soy las latas que protejen mi casa de la lluvia, 
y también la música que se produce cuando baila cada gota sobre su superficie, maravillando al que se guarece bajo mi alerón.
Soy también el camino de ripio y de asfalto que me dirige siempre a casa.
Soy todos los árboles de mi quebrada, el blanco de las flores de quillay,
la madera roja de los arrayanes, el perfume del peumo, la voraz quila, los robustos y añosos robles cuyas hojas susurran al viento melodías de paz.
Soy el agua que corre en mi estero y que alimenta mi casa y mi cuerpo,
soy la lluvia que arrecia en las noches acunando nuestros sueños.
Soy el camino a la playa y al fiordo tranquilo que lo baña, 
y la desembocadura de mi río que, constante, viaja desde alguna de las tantas vertientes que riegan esta mágica isla.
Soy las nubes que nacen evaporadas de nuestro bosque,
donde la tierra hace el amor con el cielo.
Soy todas esas hermosas estrellas que puedes observar en las noches de luna llena y que a veces se esconde detrás de las inmensas y tormentosas nubes con sus innumerables tonalidades grises y negras.
Soy los canes de mi vecino, que me ladran cada vez que me acerco a los límites de mi campo con su territorio,
soy quien recibe sus lametazos de saludo y quien les agradece por reconocerme pese al transcurso del tiempo.
Soy el camino serpenteante a Huillinco, ese lago hermoso, quieto y frío, que durante las mareas altas se roba las costas.
Soy las dunas del camino a Cucao, 
soy su playa de arenas negras donde las olas golpean con furia su costa en el vendaval.
Soy esa entrada de mar que corta el camino al Muelle de las Almas.
Soy ese vehículo que cargo a tope en cada viaje para retornar mi cuerpo material a aquel lugar donde dejo mi espíritu cada vez que lo visito.
Soy el aguilucho que caza en las tardes, 
soy las ovejas del vecino que pastan tranquilas, 
soy los loros que vuelan en su bandada y que se posan sobre las copas de los árboles que rodean mi hogar.
Soy el silencio de mi casa vacía,
soy todo eso que dejo allá, 
soy la salida Quinched, el camino Huitauque, el portón que me deja acceder a mis sueños hechos realidad,
Soy la cúpula celeste que se cierne sobre nuestras cabezas,
Soy mi tierra,
Soy todo y soy nada,
Soy feliz.





lunes, 28 de agosto de 2023

215ta Entrada, Allegro: I've been dodging rain drops, 311.

Siempre que nos juntamos con mi familia, se produce una cosa maravillosa. Nos invade la nostalgia y contamos nuestras anécdotas, preguntamos por nuestros parientes, pedimos noticias de los cercanos y conversamos sobre nosotros, sobre nuestros sueños y proyectos, sobre aquello que con tanto esfuerzo y sacrificio hemos logrado.

Estas instancias son sublimes, pues nos permiten ver por unos minutos, los fragmentos de las almas de quienes hemos compartido este camino llamado vida.

A veces quisiera que el tiempo o las energías nos permitieran compartir todos aquellos matices que nuestros ojos captan y que se graban en nuestra memoria; todas esas emociones que han calado hondo en nuestros corazones, y por supuesto, todas aquellas verdades que la vida les ha ido revelando en el transcurso de los años. 

Me encanta escuchar las historias de nuestros predecesores y ancestros, como ellas forjaron la construcción de estos extraordinarios y resilientes individuos que conforman mi familia, y como aportar de alguna manera con mi propia sabiduría y experiencia vital, la que le podría servir a futuras generaciones para que, ojalá, tomen mejores decisiones al momento de enfrentar la vida y no cometan los mismos errores que uno por ignorancia y desconocimiento cometió; estas historias, toda esa información que uno les entrega tiene por objeto permitirle a otro ser ahorrarse unos momentos de incomodidad o de sufrimiento, o le facilitará  ver la vida de otra forma, o incluso, ojalá, alcanzar sus metas, pues la experiencia forma parte del conocimiento que levanta el velo de la incertidumbre (cosas que cuando uno es joven no está verdaderamente interesado). 

Hoy también descubro que me gusta escarbar en las personalidades de los jóvenes, sus experiencias novedosas rodeadas de cosas nuevas que, para uno en su adultez, son rara vez apreciables. A veces me alegra tener "algo" en común con ellos, conocer una aplicación o un juego del que podamos conversar y compartir. ¿Es esa energía juvenil la que tanto añoramos cuando llegamos a la senilidad?

No sé por qué antes evitaba tanto vivir esta experiencia, como si encerrarme en un capullo de silencio me protegiera de algo que estaba destinado a hacerme crecer como ser humano (no digo persona, porque no me gusta su significado); o el miedo al rechazo por la inexistencia de estas "super experiencias" que uno se suponía debía vivir y que yo, por mi naturaleza egoísta, nunca me atreví a vivir. En realidad, si sé por qué las evitaba tanto, sin embargo, me vi obligada a salir de esta burbuja y experimentar el mundo y sus enormes montañas rusas de emociones que, espero hoy, estar mejor preparada para enfrentar sus altos y bajos.

Hoy celebro estas experiencias, las disfruto un montón aunque a veces me sigan pareciendo un poco superficiales y agoten todo lo que resta de mi energía mental... conversar de la vida es como tener un telescopio (¿o microscopio?) a otras dimensiones, a los mundos ocultos en las mentes de otro ser humano. 

A veces encuentras gente que tiene talento para contarte sus cosas, y pareciera que un libro ha sido abierto ante ti, lleno de ilustraciones de colores y onomatopeyas (a veces, eso sí, le ponen mucho color); otras, en cambio, tienes que usar todos tus sentidos para descifrar la verdad entre sus códigos, actitudes y gestos, ya que detrás de su superficie puedes encontrar esa parte transparente de su ser, su luz y oscuridad, esa parte de nosotros mismos nos negamos a compartir, un atisbo de  "La Sombra" que  C. Jung nos cuenta en su libro "Los arquetipos y lo inconsciente colectivo".

Creo que haber aprendido a observarme con honestidad fue la mejor herramienta que esta existencia me ha otorgado, a saber: a través de mi propia experiencia descubro la verdad, la comparto y comparo con la de otros, y así construyo este ser, en parte espíritu, en parte cuerpo, y con su alma en medio, luchando por encontrar la paz (que generalmente se encuentra en los brazos de mi compañero de ruta), buscando llegar a la línea infinita que se dibuja en el horizonte... pero no cualquier horizonte, no... sino aquel que llena mi éter, ese horizonte que tengo a 1.231 kilómetros de esta ciudad... donde mis lechuzas vuelan libres, los aguiluchos se pelean por la soberanía del cielo y el pudú se acerca a mi casa a comer el pasto salvaje que crece a su alrededor.



jueves, 22 de junio de 2023

214ta Entrada, Allegretto: Sinfonía N°7 en A, Op.92: 2; Ludwig van Beethoven


Hoy quiero reflexionar sobre el negacionismo... negación tiene su origen etimológico del latín "negatio" que significa acción y efecto de decir no, entonces podemos decir que el negacionismo es una creencia colectiva que niega ciertas acciones o hechos.

Desde esta definición podemos señalar que todo aquello a lo que se dice no, de forma arbitraria, terminará siendo "negado" y "censurado" del relato. ¡Qué cosa más terrible si esta actividad se vertiera sobre los anales de la historia para satisfacer los oscuros deseos de una minoría, que se alimenta de mentiras políticas para alcanzar nuevas cuotas de poder! Y bueno, eso es lo que pasa en mi país cuando se censura la historia y se enarbolan ciertos personajes mártires, cuando la realidad es que fueron responsables de todo el desastre que siguió a su caída y fallecimiento.

La gente olvida que nuestras historias no son todas bellas, que la historia tiene distintos matices y que hay que apreciarlos todos, no emocionalmente, si no que racionalmente de forma que, conforme la comprendamos, entenderemos que de la supuesta luz llegó la más profunda de las oscuridades, y que de ellas y con el transcurso del tiempo, se alcanzó nuevamente a alcanzar, en parte, la iluminación. Eso es aprender de los errores, pero negarlos también implica no aprender, no ver lo bueno, no valorar los sacrificios, no entender que las personas mueren por sus ideas y que eso es intrínseco a nuestra naturaleza; y que por ello, debemos OBSERVAR nuestros pensamientos y las ideas que tratan de IMPONERNOS para coartar nuestra libertad de creencias, de ideas, de pensamientos, lo que nos lleva a actuar y a ser RESPONSABLES de los efectos de toda esta cadena concatenada: desde el pensamiento hasta la consecución en la realidad.

Por ello existe el respeto a que los demás crean, observen y pregonen, no obstante de la libertad de los otros a pensar y creer distinto, sin invalidar sus argumentos y razones por las que creen lo que creen (aunque pensemos que son estúpidos si sus razones se remiten a meros hechos y análisis emocionales), aunque la idea del "bien común" sea siempre la excusa de unos o de otros, se debe evaluar en la realidad qué "idea" se alcanza de forma más cercana y universal.

Por ello, considero al negacionismo un atentado a la razón, a la historia y a la humanidad; significa NEGAR ARBITRARIAMENTE la realidad de unos en pos de otros que alzarán estas banderas para fines perversos. Fines que deterioran las facultades humanas del pensamiento lógico y racional, atentando contra nuestra verdadera dignidad y la naturaleza divina de la entelequia y las emociones. Así nos matan, así destruyen a Zaratustra, a Jesús, a Akenatón, Buda y Krishna y tantos otros maestros ascendidos... así acceden a nuestros templos y los destruyen desde dentro... sin la luz de la razón, estaremos sumergidos en la oscuridad y la esclavitud mental, sólo por no haber hecho el esfuerzo de detener a los malvados que buscan negar, no sólo la historia, si no que a nuestra especie humana.

miércoles, 26 de abril de 2023

213ra Entrada, Presto Agitato: Sonata N°14 "Moonlight" in C-Sharp Minor, Op.26 N°2: III Presto Agitato


Venía enmimismada caminando por Avenida Vitacura escuchando esta maravilla de música, jugando con mis manos como si éstas pudieran, en el aire, recrear esta alegoría a la pasión.

Caminé muchos pasos mirando sin mirar, respirando el aire tibio del día abochornado, mientras mi corazón latía al ritmo soberbio de las teclas de este piano. 

Nada había frente mío, ni los árboles con sus brazos desnudos soportando este otoño gris; y las gentes a mi alrededor pasaban sin rostros, mientras mi cabecita estaba absorta en estas notas voraces que absorben el tiempo. 

Sólo un semáforo y su señal de "detención" de peatones pudo desactivar el modo automático de mis pasos, trayéndome de vuelta a la realidad... mis pensamientos volvieron al "modo existencia", volví a respirar hondo y repasar por enésima vez lo que tenía que hacer, lo que me queda por realizar y la ruta que seguiría en los próximos 20 minutos.

Y así, esa luz roja frente a mis ojos logró desvanecer el hechizo en el que Beethoven me sumerge cada vez que lo escucho. Quizá de vuelta a la oficina escuche la 5ta sinfonía en su 3ra parte, sólo para hacer un funeral solemne a ese momento de magia en que mis manos dibujaron en el aire esta hermosa y apasionada música. 

martes, 28 de marzo de 2023

212da Entrada, Adagio: Love Song, Leslie Duncan

Siento una angustia tremenda, ver y entender cómo mi país, mi cultura y mi gente, se va a la mierda... como la "opción" de agarrar todas nuestras cosas e irnos a otro infierno, donde al menos podamos hacer nuestro proyecto de vida, lejos de todo y de todos los miedos e inseguridades externas que azoran nuestro bienestar material, se hace cada vez más deseable. ¿Vendemos todo y nos vamos a la cresta de la loma? Preguntas que se susurran en los arrullos del sueño.

En el momento en que mi fe en nuestro pueblo se quebró, cuando la imbecilidad fue cooptada por la política mafiosa y drogadicta, que usa los ideales del marxismo y socialismo como una bandera de lucha abstracta, cuando su lucha es únicamente en contra de las personas que buscan "salvar", entonces me di cuenta que la sociedad está condenada... y cuando se transformó en obligatorio ponerse esas inyecciones, supe que debía renunciar a mis valores y pensamientos para obtener la libertad que es natural e inherentemente mía.

Estoy cansada de luchar por un futuro que cada día parece más lejano, no obstante, aquí casi presente y casi palpable, al alcance de mi mano y a su vez etéreo, abstracto, pero inevitable. Espero tener la fuerza suficiente para terminar este proyecto de ya 5 años, complementar mi "profesión liberal"... e irme a vivir a las suaves colinas de mi sur, con el cielo y los fiordos donde mis ancestros descansan, donde se respira la paz y el silencio de las noches estrelladas.

Lo único que sé, es que mi hogar se encuentra allí donde tu corazón late, y que y aunque el miedo subsista en nuestro diario vivir, yo estaré tranquila en ese lugar donde mi corazón descansa.