Estamos a finales de este 2021, y me vine a encontrar con mi rincón, con mis memorias, con mis ideas, con mi "yo" del pasado.
No puedo negar que adoro leerme y darme cuenta que me di tips para el futuro que es ahora.
Las ideas del pasado están fuertemente enraizadas en mi mente, pero la mente donde se alojan flota en el aire ingrávidas, más cerca del cielo que de la tierra, sin apegos, volando sin detenerse hacia la cúpula eterna del cielo.
Durante estos años me he preocupado no sólo de estudiar las ciencias jurídicas y sociales, me he preocupado de estudiar historia, pero no cualquier historia, si no esa que no es oficial, esa que tratan de censurar, esa que explica la aparente desconexión entre el hoy y el ayer.
En este mundo dual o dicotómico, rodeado de gente que sufre los males del oxímoron y sus relativas disonancias cognitivas, no todo parece degradarse como la luz en el primas, si no ¡todo lo contrario! pareciera que la oscuridad terminará por apoderarse de nuestros corazones y almas. Pero para llegar a ellas, la estrategia es primero debilitar el cuerpo. Si el continente es débil, no será capaz de mantener ni transmutar su contenido; por eso, hay que cuidar de lo que hay afuera para que por consiguiente lo de adentro también esté bien; eso sí, sin el adecuado equilibrio solo se descompondrá el contenido.
Equilibrio, ¡¿qué es eso?! ¿un pie en el aire sin que el cuerpo caiga? ¿ni tan adentro que te quemes ni tan afuera que te hieles? esta palabra y su significado me trascienden de alguna manera y me inquieta, pues parece absolutamente efímero, este "equilibrio" que representa un estado de paz u orden en el caos, pareciera suponer una búsqueda incansable en el ser y estar, la que rara vez alcanza a durar unos cuantos segundos antes que el "chimpanseo" mental ahogue el silencio y nos vuelva a preocupar.
Y bueno, ya perdí el hilo del pensamiento que comencé a rumear ayer, razón por la cual, y luego de una sesión doble de Matrix Resurrections, me pareció pertinente señalar las frases de la película que más me gustaron, aunque no me haya gustado el final:
1) "Es lo que pasa con las historias, en realidad no terminan ¿o sí?, seguimos contando las mismas historias de siempre, con diferentes nombres, diferentes caras (diferentes cuerpos)... después de tantos años, volver a donde todo empezó: ¡volver a la Matrix!"
2) "La clave es la ficción, el único mundo que importa es el que está aquí (mente), y los humanos creen cosas tan locas... ¿por qué? ¿qué valida y hace reales sus ficciones? las emociones. [...] ¿te has preguntado por qué tienes pesadillas? ¿por qué tu propio cerebro te tortura? Somos nosotros optimizando su desempeño [...] en mi Matrix, entre más los manipulamos, más energía nos producen... ¡qué loco! [...] la mejor parte es que nadie se resiste, todos están más felices que nunca encerrados en sus cápsulas, como puercos en lodo.
[...] Añorando en silencio lo que no tienen, mientras que les aterra perder lo que sí tienen. Para el 99% de tu raza esa es la definición de realidad. Deseo y temor"
3) "Ahora se sienten bien por lo que hicieron, ¡lógico! fue una victoria... bravo... ahora ¿qué?, ¿vinieron a hacer un trato o algo así? ¿creen que tienen todas las cartas porque pueden hacer lo que quieran en este mundo?. Yo digo, que lo intenten. Cambienlo, con todo, vuelvanse locos, pinten el cielo de miles de colores... pero esta es la cosa: El rebaño no irá a ninguna parte, les gusta mi mundo, no quieren este sentimentalismo, no quieren libertad ni tener poder, quieren permanecer controlados, necesitan el confort de la certeza, y eso se logra con ustedes encerrados en sus cápsulas, inconscientes y solos, igual que los demás."
Dado que esta reflexión no fue terminada ayer, y no me estresaré en terminarla, quiero poner el "animus parrandiandi" previo al fin de año. No importa si no hay fiesta, no importa si no hay reunión, si el alma es feliz, lo demás es accesorio. Y aunque se me caiga el "carné'" feliz víspera de nuevo ciclo solar.